—¿Qué es poesía?, dices, mientras clavas
en mi pupila tu pupila azul,
¡Qué es poesía! ¿Y tú me lo preguntas?
Poesía… eres tú.
Así comenzaba la rima XXI de Gustavo Adolofo Becquer que, como loros, repetíamos ante la inquisidora morada de nuestra profesora de Literatura, seguramente sin saber ni qúe era poesía, ni quien era Becquer ni para qué teníamos que aprendernos esta rima…
A veces nos pasa como con la rima que repetimos la respuesta «es el cumplimiento de los requisitos del cliente…» , de forma automática…
Los clientes lo saben cuando la ven. Los proveedores juran y perjuran que sus bienes y servicios la tendrán. Ambas visiones a menudo carecen de una definición clara y previa de qué es calidad y esto lleva a confusión y frustración al intentar determinar simplemente qué y cómo lograrla y cuándo y cómo entregarla al cliente.
Los project managers probablemente sienten esto más agudamente. Un cliente puede exigir calidad y una organización pueden prometer entregar calidad pero es el project manager quien tiene que hacerlo. Un fallo puede tener graves consecuencias a corto y a largo plazo para el project manager y su organizacion.
Dada su importancia para los buenos resultados del proyecto, la calidad debería ser un problema resuelto hace mucho tiempo. Pero no es así. Los proyectos siguen estando plagados de objetivos de calidad imprecisos y métodos de gestión de la calidad arcanos, más adecuados para una línea de producción. Y, todo ello, condena el proyecto a unos resultados menores de los previstos, en el mejor de los casos.
Existe otra forma de hacerlo, ¿No? Desde el punto de vista de fabricación de productos o entrega de equipos la calidad es, en gran medida, un problema resuelto. Las técnicas y herramientas de calidad que se han ido desarrollando y perfeccionando en los últimos 100 años hasta alcanzar el nivel actual son ya asunto de ciencia, de procesos, no un arte.
Aplicar estas formas comprobadas de gestión de la calidad de los proyectos debiera ser una simple cuestión de transferencia.. …pero este es el problema. Cada proyecto es de su padre y su madre, cada uno tiene sus peculiaridades, su resultado, por definición es un producto o servicio único. Para un proyecto cuyo objetivo es, por ejemplo, crear un nuevo manual técnico tendrán muy poca utilidad técnicas y herramientas de calidad de utilizadas en fabricación. Y éstas son las que con todo detalle explica la Guía del PMBOK que es una Guía para la Gestión de Proyectos no de Operaciones…
Y te pregunto, ¿Qué es calidad?
¿Cómo la gestionas en tus proyectos?
¿Qué cambiarías en el PMBOK?